La Realidad entre las utopías y las distopías

 


Tiempos de elecciones y delegaciones representativas

La representación política puede ser entendida como responsabilidad funcional (Leiras, 2008), en relación con la competencia técnica, o personal, respecto de la relación que se establece con mayor o menor nivel de receptividad, de los representantes hacia los representados, lo que nos introduce en la discusión sobre la rendición de cuentas o accountability (O’Donnell, Iazzetta y Vargas Cullel, 2003).Este último concepto adquiere especial relevancia para una adecuada comprensión de los diferentes niveles de responsabilidad –vertical y horizontal– (O’Donnell, 2007) a los cuales se encuentran sometidos los líderes políticos en su relación con la ciudadanía, las agencias de control institucional, y los diferentes actores sociales y políticos. En relación con esta cuestión, una consecuencia a destacar, en ese escenario internacional de las últimas décadas de multiplicación y al mismo tiempo debilitamiento de los actores estatal-nacionales, fue el surgimiento de regímenes democráticos electos cuya característica definitoria ha sido la relativa irrelevancia de los límites constitucionales sobre el ejercicio del poder y la existencia de fuertes restricciones –por acción u omisión– en el ejercicio de los derechos y garantías individuales. La perplejidad que generaron estas nuevas democracias llamadas imperfectas o iliberales (Zakaria, 1997; Merkel, 1999) –adjetivación que calificó la baja calidad en formas constitucionales y contenidos ciudadanos de dichas democracias– radicó en los fuertes conflictos y tensiones tanto en términos axiológicos como en el terreno de las prácticas concretas, entre las nuevas democracias y los fundamentos del liberalismo constitucional y que comprendió también al propio modelo de democracia contenido en el desarrollo histórico del Estado de derecho.
Si bien los modelos deficitario o iliberal de democracia se funda-mentaron en la soberanía popular como principio de legitimidad del poder político y en el acceso al poder mediante elecciones competitivas tanto por parte del poder ejecutivo como así también del poder legislativo, existieron determinadas prerrogativas que definieron límites al ejercicio del control institucional, como por ejemplo la extralimitación puesta de manifiesto a través de la utilización recurrente y sistemática de poder de veto, o de los decretos de necesidad y urgencia, teniendo como consecuencia una violación de los límites constitucionales y el debilitamiento de las garantías respecto del ejercicio del poder político basado en el gobierno de la ley (Bosoer y Leiras, 1999). Aquí es donde estaría presente entonces el debate sobre la propia calidad institucional de las democracias emergentes en América Latina y de aquellas instituciones democráticas que permitieran un mejor control de la ciudadanía hacia los líderes políticos (Schmitter y Guilhot, 1998). 

 En este sentido, el funcionamiento de las denominadas “democracias delegativas” (O’Donnell, 1997, 2011) en las últimas dos décadas, tanto en América Latina como en el este europeo, estuvo alejado de los parámetros de desenvolvimiento que permiten definir a las democracias propias de los países capitalistas desarrollados, como institucionalizadas. Al respecto, el autor argentino Guillermo O’Donnell sostenía lo siguiente:
“Al usar el término delegativa me refiero a una concepción y practica del poder ejecutivo según la cual por medio del sufragio se l
e delega el derecho de hacer todo lo que le parezca adecuado para el país. También demuestra que las democracias delegativas son intrínsecamente hostiles a los patrones de representación normales de las democracias, a la creación y consolidación de las instituciones políticas y, específicamente, a lo que denomino “rendición de cuentas horizontal”. Con esto me refiero al control de la validez y legitimidad de las acciones del ejecutivo por parte de otros organismos que son razonablemente autónomos de aquel (O’Donnell, 1997:293).Otro aspecto destacado por O’Donnell ha sido el “carácter esquizofrénico” de los Estados en el que se basan las nuevas democracias. La coexistencia de instituciones y prácticas políticas de carácter democrático y autoritario, estas últimas como expresión de la denominada vieja política (Panizza, 2000), han constituido su rasgo principal:
“En estas situaciones, Estados ineficaces coexisten con esferas de
poder autónomas y con base territorial. Estos Estados son incapaces de asegurar la efectividad de sus leyes y sus políticas a lo largo del territorio y el sistema de estratificación social. Las regiones periféricas al centro nacional (que por lo general sufren más las crisis económicas y cuentan con burocracias más débiles que el centro), crean (o refuerzan) sistemas de poder local que tienden a alcanzar grados extremos de dominación personalista y violenta (patrimonial y hasta sultanista, en la terminología weberiana), entregados a toda suerte de prácticas arbitrarias (O’Donnell, 1997:296).
En muchas de las democracias deficitarias o iliberales que están
surgiendo, la efectividad de un orden nacional encarnado en la ley y en la autoridad del Estado se ha ido desvaneciendo no bien nos alejamos de los centros nacionales y urbanos. La crisis del Estado, en tanto representación de legalidad y la consecuente incapacidad para hacerla cumplir en forma efectiva, llevaba a la construcción de una democracia con una “ciudadanía de baja intensidad”

AMÉRICA DEL SUR EN LOS COMIENZOS DEL NUEVO MILENIO: ENTRE LA CONTINUIDAD Y EL CAMBIO—SANTIAGO LEIRAS (COORDINADOR), autor de la presentación de donde extrajimos el citado texto.

En tiempos electorales, la tentación a las generalizaciones y reducciones simpllistas de una realidad que, a poco de considerar datos, información, opiniones y reflexionar interpretativamente sobre estos surge por demás compleja, como reflejo de una realidad mayor que trae consigo todos los elementos de un momento particular en la historia de la humanidad donde mucho de lo sábido resulta cuestionado, mucha verdad resulta o falseada o bien descubierta falsa, y nos enfrenta al propio desinterés y apatía sumidos en nuestras “luchas” diarias por obtener el dinero necesario en los bolsillos con el que “nos ganamos la vida”y obtenemos lo necesario para vivir “esa vida ganada con ese esfuerzo diario”, sin dar lugar a la reflexión inteligente y la participación solidaria en los espacios de construcción de lo común, que resulta así mera agregación de las acciones individuales dispersas. ¡¿Que es entonces lo que cohesiona a cualquier democracia en estos tiempos neoliberales donde la centralidad de la vida esta en ganarla diariamente obteniendo dinero?! ¡¿Como pensarnos en comunidad si mi esfuerzo diario esta en “ganarme el mango todos los días?! Esto explicaría en buena medida el desinterés y la apatía respecto de “lo político” y “la política”, o el escaso interés concentrado en grupos que lo piensan como una actividad para conseguir ese dinero diario y ganarse la vida, tergiversando el sentido de lo común, en un intrumento mas para la salida individual a los problemas y dificultades a los que nos enfrentamos en estas realidades así, neolliberales.

¡¿Dónde estaría allí el sentido de “representación”?! Quizá esta sea la pregunta mas facil de contestar en tanto, si la centralidad de lo común esta puesta en “ganarse el mango diario”, la centralidad de “lo político” pareciera la misma y en este sentido, la única disputa que parece cobrar interés esta fundada en si confiamos en que aquel a quién votamos usara las herramientas que el poder político permite, por medio de esa elección, para su propio interés individual o para facilitarnos ese interés individual a los que le votamos. Esta claro que ambas situaciones deberían ir juntas pero tendemos a exigir en los “otros” lo que no estamos dispuestos a realizar y pensar en nuestras decisiones “individuales”. Es que si nuestro interés y el de nuestro representado fuese el mismo ¿Dónde estaría el problema de representación? La gran paradoja neoliberal es que precisamente enfrenta “lo individual a lo común” por tanto el que representa el interés individual se torna evidentemente contrario al interés individual del otro, porque sino se transformaría en un interés común. Esta contradicción es irreductible y nos confronta con nuestras propias formas incoherentes de entendernos en la vida y de tomar decisiones en lo diario y en aquellas elecciones de representaciones delegadas que supone cada acto leccionario o cada momento de validación de esa delegación en el ámbito de la democracia.

Si intentamos una reflexión un poco menos superficial y de sentido común, observamos lo que pareciera ser condición de la democracia argentina, de resumirse toda cuestión a lo que las redes sociales nos tienen tan acotumbrado … me gusta (like = El emoji con carita feliz) o su inversa. Se trastoca así el sentido de representación por un sentido de elección (¿Estético, subjetiva, perceptiva?), que deja fuera toda racionalidad o toda elección argumentativa o que signa algún sentido o algún contenido, sino político e ideológico, al menos de interés común.



Se habla en el mundo de una “crisis de representación” de las instituciones occidentales, capitalistas, neoliberales, en las actuales “sociedades de la información y la comunicación” dónde, otra paradoja, le impresionante ola de datos, información y transmisión de estos, en lugar de resultar en individuos mas informados y mas capacitados para reflexionar y argumentar y construir racionalidad, produce sociedades ápaticas, perezosas para el pensamiento, que se refugian en las razones de sus sensaciones, emociones, percepciones subjetivas, pre-juicios, mitos y miedos. Es que el conocimiento impide refugiarse en el “eso no lo sabía” y por tanto las decisiones conscientes son siempre las que imponen mas responsabilidad. Y si lo que importa es “ganarme el mango todos los días” “Tener el dinero necesario en mi bolsillo al terminar la jornada”, cualquier racionalidad resulta contraria en tanto comenzaría a distinguir cuánto de ese dinero “ganado” en mi bolsillo, fue resultado de que “otro” lo perdió o no tuvo la posibilidad de adquirirlo.

David Cufré, periodista que escribe en página 12, reflexiona sobre como oficialismo y oposición buscan contener a los descontentos de su espacio

Choque de modelos

El Gobierno remarca que para profundizar el rumbo económico necesita ganar las elecciones y fortalecer su poder político. Muestra los cambios estructurales respecto de la gestión del macrismo y promete avanzar con la agenda de transformaciones que demoró la pandemia. Juntos por el Cambio pide más ajuste y se endurece por derecha.

(Por lo que veníamos diciendo, Las Primarias Abiertas, simultáneas y Obligatorias (PASO), mas que confrontación de modelos, representa esa división entre lo individual y lo común a lo que falsamente nos han logrado introducir como disputa, los medios de comunicación que, corporaciones económicas (Comúnes con intereses de grupo minoritario), sostienen sus negocios y capacidad para concentrar dinero en detrimento de un reparto mas equitativo para el común (Las grandes mayorías))

Uno de los motivos de descontento que manifiesta un sector de votantes del Frente de Todos con la actuación del Gobierno es, según su visión, que le faltó decisión política para confrontar con el poder económico. La suba de precios, en especial de los alimentos, y las marchas y contramarchas en la frustrada nacionalización de Vicentin son las quejas más repetidas. Expresan desilusión y dicen que ahora votarán en blanco o no irán a votar. A mediados del año pasado otra causa de malestar era que no se avanzaba con el aporte extraordinario de las grandes fortunas, que finalmente se aprobó y se cobró. También había fastidio porque el Estado no tomaba el control de la Hidrovía, en lo cual ya se dio un giro en esa dirección. Pero para esos votantes del oficialismo en 2019, estos hechos no alcanzan a compensar la frustración por todo lo demás.

Del otro lado, en Juntos por el Cambio, los reproches o los intentos de autocrítica que hacen algunos de sus referentes en materia económica pasan por considerar que el recorte del gasto público en el primer año de gobierno de Mauricio Macri fue demasiado gradual. Lo dijeron en los últimos días el candidato a diputado Martín Tetaz, el ex ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, y el ex presidente del Banco Central, Guido Sandleris. También argumentaron que como la causa principal del endeudamiento público es el déficit fiscal, lo que debería hacer el gobierno de Alberto Fernández es un duro ajuste para equilibrar las cuentas. Y como la inflación es culpa de la emisión, debería apretar al máximo el torniquete monetario.

En resumen, la idea que transmite la oposición es lo que ya dijo el propio Macri en aquel encuentro con Mario Vargas Llosa en la campaña de 2019, cuando le preguntó qué haría en un eventual segundo mandato: “Lo mismo pero más rápido”.

Ese mensaje le sumó millones de votos al Frente de Todos en aquella elección. Después de cuatro años de gestión de los CEO como Juan José Aranguren, Mario Quintana, Gustavo Lopetegui o Pancho Cabrera; de los Messi de las finanzas, como Toto Caputo; de los consultores expertos de la city y la televisión, como Carlos Melconian o Dujovne; de los cracks de la academia, como Alfonso Prat Gay, Federico Sturzenegger o Lucas Llach, entre otros, muchos ciudadanos que habían comprado las promesas de Cambiemos respecto de que la Argentina estaría mejor de lo que estaba en 2015, que habría pobreza cero y lluvia de inversiones, que no se tocaría lo bueno y se mejoraría lo malo, decidieron abandonar los globos y retornar al peronismo.

Vamos a empezar por los últimos”, era el discurso de Alberto Fernández para administrar las expectativas de recuperación de la economía y reparación de las heridas en el tejido social que había dejado una nueva experiencia neoliberal. Pero el plan trazado para dejar atrás el fracaso de Cambiemos se topó con un desafío mayúsculo e inesperado, como fue la llegada de la pandemia. El mundo se sumergió en una crisis inédita, la peor en más de cien años, y la Argentina, que ya venía castigada, sufrió otro golpe en el mentón.

Tanta crisis, por tanto tiempo, inevitablemente genera desaliento. La paciencia se acaba y ahí es cuando surgen los cuestionamientos de adherentes al Frente de Todos, en especial por izquierda, por no recibir las respuestas que esperaban. Por ejemplo, imponer condiciones a los formadores de precios o cobrarle más impuestos a sectores concentrados.

Lo curioso es que para avanzar con más fuerza o más rápido en esa línea el oficialismo necesita imponerse en las elecciones y aumentar su caudal político, su representación parlamentaria. Cada voto que pierda le hará la tarea más difícil.

Juntos por el Cambio, a su vez, resulta interpelado por la extrema derecha, los llamados libertarios, y por los medios de comunicación, que buscan desgastar al Gobierno como sea.

Es decir, tanto el oficialismo como la oposición se ven tironeados desde los extremos, y ambos están dedicando los últimos días de campaña a tratar de contenerlos. El desafío es tan parecido que unos y otros coincidieron esta semana en que los próximos comicios marcarán un choque de modelos.

El Presidente aprovechó la celebración del Día de la Industria para hacer comparaciones:

* “Entre 2016 y 2019 la Argentina fue el país que más se desindustrializó en el mundo, tomando los 50 PBI más grandes. Cerraron 25 mil pymes. Se destruyeron 161 mil empleos fabriles, con 21 de 22 sectores que expulsaron operarios. Sobre 48 meses de gobierno de Macri, en 46 hubo pérdida de puestos de trabajo industrial. El salario real en las fábricas se contrajo 14,8 por ciento”.

* “Desde 2019, 20 de 24 sectores manufactureros tienen más empleo que a fines de 2019. Son 25 mil puestos más que cuando Macri dejó el poder. Van 12 meses seguidos con aumento de la ocupación. La inversión productiva creció 14,3 por ciento en relación al promedio de aquel año. Hubo más de 900 anuncios de inversión por 35 mil millones de dólares. La actividad fabril alcanzó el mayor nivel desde mayo de 2018”.

Un cambio tan rotundo fue posible, explican en el gabinete económico, por tres motivos fundamentales: se empezaron a controlar las importaciones, bajó la tasa de interés y terminaron los tarifazos de servicios públicos. El otro aspecto fundamental son los controles cambiarios y sobre los movimientos de capitales especulativos, que dieron estabilidad al dólar, más allá de las presiones permanentes en una economía que soporta la flaqueza estructural de ser bimonetaria.

Macri, por su parte, dijo que las empresas solo pueden ganar plata si evaden impuestos. Volvió sobre la necesidad de bajar el gasto público y acusó al Gobierno de espantar al capital privado.

El choque de modelos, más allá de las necesidades políticas de cada fuerza, será la clave de la elección.

(Página 12)

Unas primarias muy descafeinadas:

la apatía y el desinterés dominan el escenario


Eduardo Lucita, integrante del colectivo EDI (Economistas de Izquierda) publica sus opiniones en ANRED

El clima preelectoral no es el mejor. No es solo por la pandemia y los temores al contagio. La apatía y el desinterés dominan el escenario como reflejo de una campaña carente de ideas y de debate político serio. «Argentina es una sociedad que se agita en la superficie, pero poco altera sus placas más profundas», nos dice la politóloga Liliana de Riz.

Todo es relativo. Si miramos desde la perspectiva del poder real, más allá de los vaivenes del poder político de turno, lo que vemos es que el bloque de las clases dominantes es el mismo que se constituyó durante el menemismo, lo que se modificó en cada momento o período es el comando de ese bloque. Por el contrario si miramos desde la estructura social vemos cambios sustantivos, como la emergencia de una pobreza estructural que ha crecido período tras período mientras la riqueza se concentra. Ergo: desigualdad social en aumento.

Si aplicáramos el concepto al actual proceso electoral veríamos en la superficie muchos fuegos de artificio, denuncias cruzadas y hasta agravios de todo tipo en una campaña vaciada de contenidos. Pero al mismo tiempo los resultados esperados no alterarían demasiado la relación de fuerzas parlamentarias Es que ni el oficialista (FdT), ni la principal oposición derechista (JxC) lograrían los objetivos planteados. Para unos se trata de ganar 10 nuevas bancas en diputados, para lograr quórum y mayoría propia. Para los otros simplemente impedir esos objetivos, con el argumento de «Estamos a 7 bancas de ser Venezuela». Mientras que en senadores a priori no pareciera peligre la mayoría oficialista.

Hartazgo, desinterés, descontento…

Las recientes elecciones en Corrientes confirmaron, con un 35% de ausentismo y 13% de votos blancos, la tendencia ya anunciada en elecciones anteriores para intendente en Río Cuarto, Salta y Misiones. Se supone que la participación nacional caerá en promedio no menos de un 10%.

Más allá de distintos indicadores utilizados, lo que resalta es una suerte de desconexión de la ciudadanía con la política y los políticos por un lado y, por el otro, la actitud negativa ante la falta de un debate serio sobre los problemas concretos del país. La falta de involucramiento de la juventud (7 millones de electores tienen entre 16 y 25 años), contrariamente a hace una década atrás, completa el cuadro. Tal es lo que surge de los análisis cuantitativos (encuestas) -resistencia a ser entrevistados (pasaron del 10 al 25%)- y cualitativos (focus group) -enojo y bronca por la falta de soluciones (inflación, empleo, seguridad).

La economía está repuntando pero no tracciona ni el empleo ni los salarios, JxC no tiene mucho para cuestionar en este punto después de su fracasada gestión económica, mientras que la campaña de vacunación luego de los primeros tropiezos está avanzando rápidamente y ha salido del radar electoral.

En una campaña tan anodina como vacía, el pasado (quién endeudó más o si fue correcto la extensa cuarentena original) se discute más que el futuro (propuestas para salir de la crisis o que proyecto de país pospandémico). Mientras que el Vacunatorio VIP, el Olivosgate y la docente «militante» son los entretenimientos del presente que lesionan al FdT.

Cambios de tácticas electorales

Las dos principales coaliciones políticas se han visto obligadas a modificar sus estrategias electorales. El derrumbe de la imagen presidencial de Alberto Fernández (producto de la acumulación de errores no forzados) llevó al FdT a endurecer sus intervenciones de campaña, dejando de lado la orientación al centro señalada por Cristina Fernández, mientras que la emergencia de una derecha ultraliberal con rasgos facistoides trajo a escena nuevamente a Mauricio Macril y debilitó la estrategia no confrontacionista de H. Larreta y M. E. Vidal. En ambos casos buscan fortalecer sus núcleos duros para evitar fuga de votos, sea por desilusión ante una gestión oficialista que no los conforma o a favor de una derecha más a derecha que la propia oposición.

A pesar de ser una elección legislativa, las futuras presidenciales están presentes. ¿Quién resultará ganador en la suma total de votos? Si lo es el FdT se fortalecerá Alberto Fernández y su posible reelección; por el contrario, si resulta perdidoso, se avecinan cambios ministeriales con fuerte presencia kirchnerista y la posibilidad de una segunda vuelta (de incierto resultado) se perfila en el horizonte 2023.

Espacios para la izquierda

En estos años la izquierda anticapitalista en sus diversas vertientes, pero particularmente el FIT-U, ha ganado visibilidad pública y presencia nacional. Estas elecciones de medio camino le permiten intervenir en la crisis política actual con autoridad propositiva.

La deuda, que el gobierno ha denunciado como fraudulenta pero la legitimará con el acuerdo que firmará con el FMI y que será una hipoteca para esta y las próximas generaciones, es el tema central. La izquierda siempre ha levantado el carácter ilegítimo y odioso de la misma y tiene la autoridad de haber bregado por el no pago o la suspensión y su investigación. Adicionalmente el tema de la reprivatización de la vía navegable (hidrovía) facilita un frente de acción común con diversos sectores opuestos a la misma. La izquierda es coherente aquí, con la carga de la deuda y la reprivatización del Paraná no habrá soberanía de ningún tipo.

La profundidad de la crisis favorece una intervención crítica del sistema, mostrando cómo la lógica de la acumulación es la que impide resolver los problemas que el propio capital provoca. Frente a la pobreza, la desocupación y la exclusión social, las propuestas de la izquierda de recomposición de los salarios e ingresos populares, de reducción de la jornada y reparto del trabajo existente y de un salario universal que satisfaga las necesidades de los más necesitados son perfectamente comprensibles.

Más allá de lo electoral será en las calles y con la movilización popular, hoy mayoritariamente subordinada a las necesidades del gobierno, que será posible hacer realidad estas reivindicaciones inmediatas. De ahí las importancia de complementarlas reforzando un bancada de izquierda anticapitalista en el parlamento.

Para este columnista un voto a izquierda en esta coyuntura puede ser un avance en una perspectiva de futuro diferente de la mediocridad actual.

(ANRED)

Campañas. Creer en nuestra gente, o reventar diciendo tonterías

El periodista Gabriel Fernandez Director La Señal Medios, editorializa:

El debate sobre los temas de campaña involucra una definición filosófica de fondo: se confía en el pueblo argentino o se supone que es un conglomerado informe con pocas luces.

La segunda opción, habitualmente radicada entre las huestes liberales más variadas, hoy contiene parcialmente a dirigentes y comunicadores que se posicionan peronistas y nacional populares.

Aunque resulte entretenido hacer consideraciones humorísticas o moraleras sobre garchar y fumar, entre tantas tonterías que se están ventilando durante la campaña presente, son pocos los que piensan que esos asuntos determinen el voto en general y el suyo en particular.

En cambio, argumentar sintética pero profundamente acerca de los pasos a dar para lograr el crecimiento industrial y el desarrollo nacional, generaría una argamasa de comprensión popular destinada a sostener el respaldo a la opción que la plantea.

Se piensa que nuestra gente no piensa.

Así, en vez de hablar sobre el Encuentro de la Producción y el Trabajo y las perspectivas de unidad latinoamericana, acciones que derivarán en más y mejor comer (no coger porque eso depende de cada individuo),  la campaña del Frente de Todos sólo contrasta en gustos y modalidades.

Eso, además, brinda pie –contra los hechos señalados- a quienes lucran con el todo es lo mismo. 

Es que hay un tiempo (un nivel) para cada cosa. Las afirmaciones sobre costumbres particulares dividen verticalmente a la sociedad, mientras que las referidas a políticas económicas la fracturan horizontalmente.

Este último quiebre es “bueno” por así llamarlo, porque encarna los intereses del mundo del trabajo. El primero es erróneo pues sitúa sectores confluyentes en bandos contrastantes.

Entre las principales exigencias del llamado “voto joven” está la generación de empleo.

Qué curioso: se parece notablemente a la demanda del resto de los electores.

(La Señal medios)

Memoria e Historia

Un elemento que debería considerarse como sustancial en cualquier tiempo de “elecciones representativas” es de la memoria histórica. Parte de la apatía y el desinterés tiene que ver con que el día a día nos insume tanto, que cercena la posibilidad de pensarnos en la historia.

Carlos Ulanovsky, Periodista y escritor de dilatada y reconocida trayectoria.

Su último libro publicado es «36.500 días de radio», Editorial Octubre. Escribe el siguiente artículo en Va Con Fimra (VCF) Tomado de “Tiempo Argentino”

Volver a Jauretche

En tiempos en que, casi sin discusiones, se exhiben como trofeos indiscutibles (como valores y doublés, diría el tango) hashtag y trending topic, no encuentro nada más actual y desafiante que los libros y artículos de Arturo Jauretche. Por eso, a los políticos, dirigentes y funcionarios con los que simpatizo les sugiero: saltéense a los comunicadores de moda; ahórrense encuestadores, youtubers y publicitarios; olvídense de Twitch y Tik tok; eviten asesores de imagen, posters de colores estridentes y videoclips tumultuosos.

Y apuesten a Don Arturo, que viene a ser el anti Durán Barba, más valioso que cualquier alerta de focus group y más auténtico que volverse tendencia en red social.

Forjado en FORJA fue un abre ojos y un despierta mentes. Todo lo que pensó y escribió hace 50 años y más fue, primero que nada, esfuerzo y revelación personal, porque antes lo vivió y lo batalló desde la humildad y la autocrítica. Aludiendo a su libro más conocido –el Manual de zonceras argentinas–, se expuso: “El primer zonzo que conocí era yo mismo, que creía en todas las zonceras. Hasta la edad de la colimba fui un convencido a pie juntillas de la ideología liberal y extranjerizante”. Nacido en 1901 y fallecido un (¡vaya fecha para un patriota!) 25 de mayo de 1974, en sus tiempos no existían (o no se usaban) expresiones como fake news, meritocracia u offshore. Pero se las arregló explayándose sobre dependencia e imperialismo y advirtió, a la par de Raúl Scalabrini Ortiz, que el colonialismo económico era antes colonialismo cultural y colonialismo pedagógico. Sus escritos deberían ser protagonistas de esta campaña electoral. Claro que, antes y mientras, deberían protagonizar currículas escolares.

Jauretche no es viejazo: es actualidad pura, y dura. “Los médicos dicen que los hombres tienen la edad de sus arterias. Yo diría que tienen la edad de sus ilusiones”, opinó en 1971 un ilusionado Jauretche. Pensador pero que nunca resignó la pelea cuerpo a cuerpo, tuvo claro que lo que movilizó a las masas y las acercó a Perón en 1945 no fue el resentimiento sino la esperanza.

Desde su propia esperanza en 1960 se anticipó 60 años. Con conocimiento de causa y tras lecturas minuciosas de La Prensa y La Nación habló acerca de la acción desmoralizadora de los medios de comunicación, que hoy son esos, muchos otros y aún más concentrados. De ellos dijo que ponen toda la artillería mediática al servicio del bajón: “El arte de nuestros enemigos es también deprimir, desmoralizar, entristecer… Nos quieren tristes para que nos sintamos vencidos, y los pueblos deprimidos no vencen ni en la cancha de fútbol, ni en el laboratorio, ni en el ejemplo moral, ni en el triunfo económico”. La siguiente reflexión parece de estos días, tanto que la actual administración debería memorizarla y tranquilizarse. “Los gobiernos populares son débiles ante el escándalo. No cuentan con la solidaridad encubridora de las oligarquías y son sus propios partidarios quienes señalan sus defectos que después magnifica la prensa. El pequeño delito doméstico se agiganta para ocultar el delito nacional que las oligarquías preparan en las sombras”.

El hombre que calificó como “la madre de todas las zonceras” a la frase-consigna “civilización y barbarie”, cada vez que tuvo oportunidad desenmascaró también a los profetas del odio. Los llamó carcamanes, lenguaraces, tilingos, cizañeros, guarangos, cipayos. En célebres y valientes textos desde la revista desarrollista Qué, antes de las elecciones que hicieron presidente a Frondizi, cruzó a los antiperonistas calificándolos como “ventajistas”, “ladrones de cadáveres”, “repetidores de slogans” y el formidable “batallones de animémonos y vayan”. ¿Se habrán dado por aludidos?

Es auspicioso que, con sus libros e investigaciones, cada uno por su lado, Norberto Galasso, Carlos Caramello y Aníbal Fernández arribaron a una actualización doctrinaria jauretchiana así como resultó jubilosa la idea deLos Piojos, que descubrieron y masificaron al personaje cantando “San Jauretche”. Herederos intelectuales del gran objetor, Fernández y Caramello, y distinguidos colaboradores, entre los que figura Leandro Santoro, hablan en dos libros –Zonceras argentinas al sol (2012) y Zonceras del cambio (2019)– del “neotilingo” y del “mediopelismo posmo”. Acertaron: el mediopelismo está tan vigente que un candidato se postuló recientemente mostrando un mechón de su cabellera. En esos trabajos recuperan la figura del, por definición, “argentino, insustancial, ligero, que habla muchas tonterías”, ese que el autor de Filo, contrafilo y punta sacó del diccionario y lo exhibió, hasta la vergüenza propia y ajena, en la vida diaria, en los medios, en la política.


 

Provocador, lúcido, nacional, popular, aquí van tres frases suyas que calzan justo en los tiempos que corren:

* “Cualquier guarango botellero, una vez que se ‘para’ ya empieza a razonar como tilingo y a despreciar a los que vienen atrás. Y a pensar como si hubiera heredado”.

* “Lo nacional es lo universal visto desde nosotros”.

* “Los pueblos pueden equivocarse en lo que quieren, pero no se equivocan en lo que no quieren”.

Aunque luchó, a brazo partido y en ocasiones armado, para evitarlas y evitarlos, el maestro nacido en Lincoln tenía claro que zonceras, y zonzos, resultarían tan insoportables como inevitables en cualquier tiempo.

El mejor auxilio será leerlo en 2021 y venideros con devoción, atenderlo y entenderlo. Porque este hombre lo pensó y dijo todo, antes y mejor. Volver a Jauretche: ahora y siempre.

(VCF)

Acto Político

El Frente de Todos bonaerense pidió “votar con memoria y sin confundirse”

Axel Kicillof, Máximo Kirchner, Tolosa Paz, Daniel Gollán y Sergio Palazzo encabezaron un acto de campaña en Vicente López.

El gobernador bonaerense, Axel Kicillof; el jefe del bloque oficialista en la Cámara baja, Máximo Kirchner; y los precandidatos a diputados del Frente de Todos (FdT) Victoria Tolosa Paz y Daniel Gollan encabezaron este viernes un acto de campaña en el que el espacio pidió a la población votar “con memoria y sin confundirse” en las PASO del 12 de septiembre.

El acto se llevó a cabo en la localidad bonaerense de Vicente López, con la presencia del titular de la Asociación Bancaria y postulante a legislador, Sergio Palazzo.

En su mensaje, Tolosa Paz pidió a los bonaerenses ”no dejarse confundir con el club de la mentira que, se llamen como se llamen, después de cuatro años de gobierno no pueden mirar a los ojos al pueblo”.

Ellos tenían el poder absoluto, fáctico, y nos devolvieron una Argentina fisurada y quebrada. Desde el Frente de Todos (FdT) pusimos la esperanza, cuidamos la vida durante la pandemia y adoptamos todas las medidas necesarias para ayudar a los sectores más golpeados”, graficó la postulante.

En tanto, Gollan ratificó que ninguno de los precandidatos del Frente de Todos está dispuesto, en el caso de acceder a una banca, “a votar leyes que atenten contra los intereses de los trabajadores, porque tenemos una historia de no hacerlo”.

El pueblo nos dice, por favor, vamos para adelante, no volvamos a esos cuatro años patéticos en que se cayó la demanda y los bancos eran para la timba financiera, mesas de dinero”, concluyó.

Por su parte, Kicillof, aseguró que los bonaerenses votarán “con memoria” en las elecciones Primarias, Abiertas, Obligatorias y Simultáneas (PASO) pese al intento de “algunos que quieren que la pandemia funcione como una pastilla de amnesia para que olvidemos como dejaron el país y la provincia” tras cuatro años de neoliberalismo.

Cuando iniciamos el gobierno que terminó con el ciclo neoliberal denunciamos como habían endeudado al país y la provincia y ahora hay un intento de convertir a la pandemia en una pastilla de amnesia para que nos olvidemos de lo que ocurrió”, graficó.

Recordó que la provincia, “después de 20 meses, terminó de renegociar la deuda con los acreedores externos, un endeudamiento tomado en condiciones absolutamente desfavorables y con irresponsabilidad que dejaron una deuda impagable en el país y la provincia”.

Durante un acto que encabezó en Vicente López en un plenario de La Bancaria, el gobernador detalló que su antecesora, María Eugenia Vidal, “en cuatro años aumentó la deuda en dólares de 5.500 a 9.100 millones”.

Eso representa un 68% de incremento”, dijo y señaló que “nunca escuchamos a Vidal, (Mauricio) Macri o (al primer precandidato de Juntos, Diego) Santilli, explicar o pedir disculpas y reconocer el desastre que hicieron”.

El desastre no es teórico o conceptual: De esa deuda el 94% vencía en el periodo siguiente. Nos tiró la deuda y el problema y esto afecta la vida de todos los bonaerenses”, resaltó.

Describió que si hubiera tenido que pagar esa deuda “con compromisos insólitos” le hubiera costado a la provincia “en cada uno de nuestros años de gobierno el equivalente a toda la obra pública que estamos haciendo”.

Agregó que en 2018 “la propia Vidal, después del endeudamiento, inició el proceso de ajuste en salud, educación y seguridad” pero aumentó “los pagos de intereses en un 122%”.

Por eso comprendo porque cruzó el Riachuelo; hizo un desastre en la provincia”, enfatizó.

El intento de la prensa porteña es que nos olvidemos quienes son, que hicieron y de dónde venimos, que el shock de la pandemia nos haga olvidar la situación en la que recibimos la provincia”, resaltó.

Ironizó con que además “ahora recorren los canales con remeras que dicen ‘ahh, pero Macri’. Tienen que cambiarla y poner ‘Ay, pero Macri, lo que dolió el gobierno que tuvieron’”.

En ese aspecto, recordó que Macri “volvió a decir que en la pandemia él hubiera hecho un cosa distinta, que cada uno hiciera lo que quisiera y pudiera y vamos viendo” y agregó que “es lo mismo que había dicho antes, que se muera el que se tenga que morir”.

Lo mismo hicieron en su gobierno con las Pymes, que se mueran las que se tengan que morir, o con las fuentes de trabajo y después vemos si nos alivia (Donald) Trump o el Fondo Monetario Internacional”, se quejó.

En tanto Máximo Kirchner señaló hoy que se necesita “pensar la Argentina desde la Argentina” y consideró que “es importante que el expresidente Macri recupere el eje, porque hay quienes se sienten representados por él”.

En relación a las declaraciones del líder de Juntos por el Cambio, quien afirmó públicamente que o cambiábamos o nos teníamos que ir, le pido que recupere el centro, que se tranquilice. Que baje un cambio y tenga un poco autocrítica. Gobernó muy mal y eso lo llevo a ser el primer presidente que se presentó y no ganó una reelección”, enfatizó en alusión a conceptos formulados hoy por el ex jefe de Estado en una radio de Córdoba.

En ese sentido, Kirchner remarcó: “Es importante que recupere el eje porque hay quienes se sienten representados por él”.

Nosotros no nos sentimos superiores moralmente a nadie, tampoco inferiores. Pero no creemos que se pueda tomar vino en un barrio sí y en otro no; que hay universidad para algunos y los demás no pueden ir”, agregó en una clara referencia dichos pronunciados por la exgobernadora bonaerense y actual pecandidata de Juntos por el Cambio en CABA, María Eugenia Vidal.

En declaraciones periodísticas, la exmandataria dijo que “una cosa era fumarse un porro en Palermo” y otra hacerlo “en una villa como la 1 11 14 o la Zavaleta, donde viven los narcos”.

Esa lógica es la que hay que debatir porque depende de dónde se nace para acceder a los derechos. Así gobernaron, con ese criterio tomaron decisiones y cada decisión estuvo siempre tamizada por el criterio excluyente”, afirmó Máximo.

Queremos y debemos pensar la Argentina desde la Argentina. Eso es lo que queremos y eso nos va a conducir a una situación de mayor inclusión no solo social”, continúo.

El líder de ‘La Cámpora’ también puso de relieve que “algunos medios porteños destaquen y pongan en tapa que el salario argentino era el más bajo en dólares”, pero recordó “son los mismos que nunca habían dicho que teníamos el salario en dólares más alto de Sudamérica cuando Axel (Kicillof) era ministro de economía”.

Tenemos que recuperar las redes sociales, en los barrios, organizar y escuchar a la gente. Espero que el próximo 12 sepamos confirmar el rumbo elegido en agosto y en octubre de 2019. Todas nuestras acciones políticas de un gobierno deben tener en el centro al ser humano”, concluyó.

(Tiempo Argentino)

Coronavirus

Mientras tanto, la peste sigue arrojando números (De las vidas que se van pocos toman conciencia)

Argentina reportó 161 muertos y 4.318 casos positivos de coronavirus, informó el Ministerio de Salud, que agregó que, con estos datos, suman 112.356 los fallecidos y 5.199.919 los contagiados desde el inicio de la pandemia en marzo de 2020.

La cartera sanitaria agregó que son 2.452 los internados en unidades de terapia intensiva, con un porcentaje de ocupación de camas de adultos de 43,8% en el país y del 44,7% en el Área Metropolitana Buenos Aires (AMBA).

De acuerdo con el Monitor Público de Vacunación,
el total de dosis aplicadas asciende a 44.049.176, de los cuales 28.249.162 personas recibieron al menos una dosis y 15.800.014 las dos, mientras que las vacunas distribuidas a las jurisdicciones llegan a 50.887.274.

De los 5.199.919 contagiados, 4.891.152 ya recibieron el alta médica, en tanto
196.411 casos permanecen activos.

El reporte consignó que fallecieron 79 hombres y 82 mujeres.

(Telam)

El Panorama Económico

Este viernes el Banco Central (BCRA) publicó el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) de agosto, el último antes de las elecciones primarias que se llevarán a cabo el domingo 12 de septiembre. El sector privado elevó levemente sus proyecciones de inflación acumulada para 2021 pero incrementó los pronósticos de recuperación económica y ajustó a la baja el tipo de cambio esperado para diciembre.

Según la mediana de las estimaciones de 42 consultoras, centros de investigación y entidades financieras, la inflación alcanzará el 48,4% en todo el año, cuando en julio se creía que iba a llegar al 48,2%.

Para el mes de agosto, los analistas consultados por el BCRA estimaron la inflación en un 2,8%. Cabe recordar que para julio habían estimado un 3%, una cifra que finalmente coincidió con la arrojada oficialmente por el INDEC.

Paralelamente, el mercado espera que el PBI crezca un 7,2% en 2021, cuando en el REM previo esperaba una expansión del 6,8%.

"En cuanto a la variación trimestral desestacionalizada del PIB, la estimación para el segundo trimestre del año se corrigió levemente", sostuvo e indicó que la contracción fue estimada en 1,6%, 0,1 puntos superior con relación con la encuesta previa.

A su vez, la estimación de crecimiento correspondiente al tercer trimestre del año se elevó en 0,8 puntos de 0,5% hasta 1,3%. Para el cuarto trimestre, los participantes del REM sugirieron un crecimiento de 0,6%.

A su vez, los participantes del relevamiento prevén que el tipo de cambio nominal mayorista promedio de diciembre sea de $105,75, $1,30 por debajo en comparación con la proyección anterior. Esto implicaría una devaluación del peso anual del 28%, bastante inferior a la inflación prevista.

Además, para septiembre de 2021, quienes participan del REM pronosticaron una tasa BADLAR de bancos privados de 34,1% similar a la registrada en julio.

Por otra parte, la proyección para la desocupación abierta para el segundo trimestre de 2021 apuntó a 10,8% de la población económicamente activa.

"Para el tercer trimestre de 2021 la mediana de los pronósticos disminuye hasta 10,5%, valor que se mantendría en el último trimestre de 2021", indicó.

En cuanto al valor de las exportaciones (FOB), quienes participan del REM estiman que para 2021 ascenderían a u$s69.385 millones, incrementándose en u$s2.110 millones con relación al último REM y u$s14.501 millones superior a lo registrado en 2020 (u$s54.884 millones).

Respecto de las importaciones, estimó que en 2021 se ubicarían u$s2.167 millones por encima del pronóstico del relevamiento previo y u$s14.829 millones mayor al dato evidenciado en el último año.

(Ambito Financiero)

Mas CEPO

La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) estableció mejoras en las medidas de control interno para las entidades financieras que deben cumplir con el régimen de información de cuentas y operaciones cuyos titulares sean sujetos no residentes, a través de la resolución general 5065/2021 publicada hoy en el Boletín Oficial.

Las modificaciones están en línea con las prácticas internacionales referidas al intercambio automático de información financiera”, destacó el organismo en un comunicado. Allí señaló que “los cambios se introducen en el marco de la experiencia recogida por el organismo y de recomendaciones efectuadas por el Foro Global de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE)”.

La normativa aborda aspectos referidos a las pautas para documentar los procedimientos de control interno para la adecuada aplicación de los procesos de debida diligencia a cargo de las instituciones financieras alcanzadas por la normativa.

También contempla un procedimiento alternativo para la certificación de cumplimiento que deberá ser suscripta por el oficial de cumplimiento designado, quién será el responsable de asegurarse de que la institución financiera cumpla con las tareas requeridas.

Asimismo, establece pautas aplicables a esquemas de residencia o ciudadanía por inversión para los casos en los que la entidad financiera tenga dudas sobre la residencia fiscal de un titular de cuenta.

(El Economista)

Controles y Regulaciones

El Banco Central de la República Argentina (BCRA) anunció que inició la inspección de un grupo de fintechs que se ofrecen como vínculo para financiar proyectos de inversión utilizando criptoactivos como canalizador del ahorro. De esta forma, busca determinar “si están realizando intermediación financiera no autorizada”.

La ley de Entidades Financieras delega en el Banco Central la potestad de requerir información cuando existe la sospecha de que una persona o empresa está realizando tareas de intermediación financiera y, de corresponder, disponer el cese inmediato y definitivo de la actividad y aplicar sanciones”, detalló el organismo a través de un comunicado.

En total, inspeccionará a nueve fintech que realizan captación de depósitos que se convierten en criptoactivos, en particular criptomonedas, que luego son aplicados al financiamiento tanto de inversiones como de consumo, ofreciendo una retribución.

Si las investigaciones determinan indicios de intermediación financiera sin autorización, el BCRA realizará las correspondientes denuncias penales en los términos del artículo 310 del Código Penal”, concluyó el BCRA.

(El Economista)

La realidad y las representaciones

En estos tiempos neoliberales, la economía domina el mundo. La concentración de dinero y del poder (Ejercicio de la posibilidad) que ello genera en detrimento de quienes tienen menos, torna casi todo asunto humano en una transacción monetaria. Si la democracia, imperfecta como toda sociedad humana y como cada uno de los individuos que la componemos, es un sistema de “representación y delegación”, probablemente y aunque no nos demos cuenta, este mejor representada de lo que suponemos o supone el deseo individual y la subjetividad de cada quién, en tanto las representaciones no dejan de serlo … representan la “individualidad” en tiempos de grandes concentraciones de dinero. Lo que deja a cada individuo a merced de su “propio esfuerzo diario” por obtener las monedas que se escapan de las Cuentas varias veces billonarias y de los papeles de colores que generan los grandes Bancos y grupos económicos en el planeta. Nadie se salva solo. Que cada quién haga su parte.

Daniel Roberto Távora Mac Cormack



Comentarios

Entradas populares de este blog